Con la entrada de grandes volúmenes del grano provenientes de las formas productivas, la experiencia del personal que labora en la unidad de despulpe y la tecnología ecológica empleada en el proceso industrial existe un mayor aprovechamiento del café y un sobrecumplimiento del plan técnico-económico de la empresa así lo confirma Norley Ramírez Carpio, director de la despulpadora de Güinía de Miranda.
“De un plan de 42 toneladas a beneficiar ya la unidad ha beneficiado 48 toneladas y continuará beneficiando gracias al grano que está acopiando de las diferentes formas productivas. Con esto aumentamos y ayudamos en gran medida a la economía del país”
Aunque el destino del café robusta es para el consumo nacional el extra saliente cumple los parámetros para la exportación según Bárbara Martínez Puerta, técnica de calidad de la planta despulpadora.
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